sábado, 28 de junio de 2008

Entre Nos (Teatro)

Crítica de teatro:
Entre Nos
Wílliam Venegas
wvenegas@nacion.com

Daguerrotipo de dos mujeres, muy distintas entre sí, que se encuentran en la banca de un parque cercano a una estación del tren, cuyo sonido solo nos es dado una vez (¿por qué no más veces para enriquecer la atmósfera?)

Ese es un detalle de dirección, y lo cierto es que Andrés Montero se encuentra más comedido de la cuenta con su empleo de los signos teatrales, sobre todo en el manejo del espacio y del ritmo, amén de que acepta un diseño de luces bastante parco de Silvia Campos.

En todo caso, es tan bueno y emotivo el texto, es tan sensible su humor que es capaz de sostenerse de manera seductora ante la falta de vivacidad de la puesta en escena de Andrés Montero.
Eso sí, el texto en manos de las actrices Eugenia Fuscaldo y Rosaura Barquero se levanta sobre su propia mirada y sobre su planteamiento para inpregnarse de hechizos y, de esa manera –fascinante–, llegar a nosotros como espectadores.

El regreso de Eugenio Fuscaldo al teatro nos la muestra, prácticamente, en estado de gracia, así de extraordinaria. Ella se ve dueña de los matices histriónicos y está inolvidable en determinadas secuencias: sus parlamentos sobre las telenovelas, las pastillas para los nervios, el matrimonio, la plenitud sexual en la mujer y su extraordinaria recitación del poema La vaca muerta , ¡genial aquí, de principio a fin!

Rosaura Barquero hace muy bien lo suyo como Laura, mujer atropellada por la modernidad y por la liberación femenina; ella es la otra cara de la moneda del personaje de la señora Fuscaldo (Leonor, mujer atropellada por la vida hogareña). Se redimen juntas.

Teatro con donaire, gustoso, juicioso y sensible, Entre nos es obra que les recomendamos con absoluta convicción. Asistan y verán.

1 comentario:

Tika. dijo...

MUchas gracias, me alagas :)

Un saludo muy grande!